Era la final de 800 metros en las Olimpiadas de Munich del año 1.972.
Dave Wottle, atleta norteamericano que acostumbraba a correr con una gorra de golf consigue que a partir de ese día sea un amuleto inseparable en todas las carreras en las que participará. A la hora de la entrega de medallas olvidó quitársela y posteriormente pedir disculpas por ello en la sala de prensa.
Ha pasado a los anales del atletismo la sangre fría con la que corrió. Hasta los 500 metros va «tranquilamente» a cola de pelotón, y consigue remontar y ganar por tan solo 3 centésimas en unos últimos 300 metros de vértigo en los que invirtió 38 segundos para ir remontando con paciencia a todos sus competidores.
Está bien, pero prefiero el de Steve Cram de 1986.
Totalmente de acuerdo. Precisamente el próximo post versa sobre Steve Cram y enlazo esa carrera. Gracias por la aportación Eduardo !
muy chulo
Gracias Gonzalo por comentar este vídeo. La final olímpica de 800 metros en 1972.